domingo, 25 de febrero de 2018

Remembering (V)

Ahora que no te puedo volver a ver, siento un pesar sobre mi corazón. Ahora que nuestros caminos se han separado tengo necesidad de ti, de sentir tu aliento de nuevo acercarse a mis labios. Ahora que te perdí, pienso en las mañanas que te despertabas junto a mí, en las que te veía tu dulce rostro dormido, tranquilo. Ahora que puedo, quiero llorar sin parar, para que en cada lágrima derramada salga parte del amor contenido en este corazón. Ahora que sé que palabras he de decir, no estás cerca para oírlas. Ahora que todo ha terminado, deseo decir una sola frase: Te quiero.

miércoles, 14 de febrero de 2018

Remembering (IV)

Especial San Valentín.

Me enamoras sin darte cuenta con gestos simples que aceleran mi corazón, el cual me pide que los siga buscando para mantener este sentimiento. Logras que lo que antes era triste, sea una sonrisa ahora, tu sonrisa. Amabilidad innata que brota de tu ser, dotándote de algo que busco y necesito, obligándome a no poder alejarme de ti. Fijarme en los detalles que no debo, amar a pesar de no sentir lo mismo. Esperar a que el tiempo decida si unirnos o trabar una amistad muy valorada.




 Te ganaste mi corazón y día a día lo llenas con cariño. Te ganaste mi corazón y lo mimas con palabras y gestos, viendo como responde acelerando su ritmo, marcando un sentimiento mirando tu alegría y tu dulzura. Te ganaste mi corazón y con ello te has ganado mi vida.


 Al igual que Romeo y Julieta, hemos de vernos a través de un balcón. Yo, tímido y oculto, observo tus gestos alegres mientras me muestras una sonrisa que eleva mi alma hasta situarme cara a cara contigo. Me alegras y me aguantas, soportas mis palabras fruto del amor o del desvarío, cuando constantemente te digo que te quiero. Haces que sea feliz solo por el hecho de estar enamorado de ti, sin importarme lo que digan alrededor. Haces que te quiera por el hecho de compartir un sentimiento. 



El último texto tiene un ligero retoque con respecto al original, una frase final eliminada por hacer perder el ritmo al resto del texto. 

domingo, 11 de febrero de 2018

Remembering (III)

Mi niña, mi ángel. Quererte es tan fácil.... Me entregas tu cariño, apoderándote de mi vida, sin que pueda hacer nada por evitarlo.
Pero, ¿querria? Por supuesto que no, me encanta estar enamorado de ti y entregarte todo lo que puedo para hacerte feliz.
Sentirme tuyo.. No hace mucho que supe que eran esas palabras. Supe de otro miedo tuyo, miedo que compartimos. Supe cuanto me necesitabas y cuanto te necesito yo a ti.
Supe sonreír sin poder hacer nada evitarlo, desatando así la alegría inmensa que desbordaba mi corazón.
Mi niña, mi amor. A la espera de una nueva oportunidad de ofrecerte mi mano, imagino el momento en el que podamos compartir aquello de lo que ya hemos hablado.
 

Te quiero. Me quieres. Y esto sigue vivo cada día.


Primero de los textos con cambios en los nombres. Uso el mote cariñoso, pero cambio el nombre por la palabra amor.

jueves, 8 de febrero de 2018

Remembering (II)

Mantengo la distancia, mantengo mi silencio. Lo que hago no es lo correcto, lo que no hago esta prohibido. Sueño con el futuro en un presente sin futuro, en un olvido de recuerdos. Miro sin mirar, encuentro sin ganas, hablo con palabras mudas. Mis gestos, divertidos y graciosos, solo causan pena y pavor. La oscuridad se cierne sobre mi, yo la he invocado. Me posee, me llena. Me consuela. Todo lo que soy es nada y todo en este instante, en esta palabra, en esta mirada. Adiós es un saludo, hola no tiene sentido, te quiero es motivo de lágrimas. Me despido sin palabras, sin gestos,sin miradas. Me marcho y solo dejo un recuerdo anclado en el fondo de un alma deseosa de ser amada, cubierta por la oscuridad de la luz que emana de un corazón ignorante.

lunes, 5 de febrero de 2018

Remembering

Primera parte de una colección antigua de textos que iré exponiendo. Habrá censura en ellos, omitiendo nombres por respeto y siguiendo la filosofía de este blog. Pero sí que son textos de autoría propia.


Tus gestos, simples, curiosos. Infantiles a veces. No molestan, no son una tontería. Son muestras de ti, de lo que existe. Son pequeños tesoros que me permiten tener ilusiones que me hacen sonreír. Ésta es tu sonrisa, nadie más podría tenerla.
Gracias por llenar mi vida con el mejor sentimiento que jamás he poseído. Desde estas palabras, este humilde siervo tuyo quiere volver a demostrar cuanto te quiere.
Te quiero. Te quiero ahora y te querré hasta el fin de mis días.
Simplemente, te quiero.